‘Juego de tronos’ ha terminado. Te haya gustado o no su final, seguro que estás de acuerdo con que esta serie nos ha dejado algunos de los mejores momentos de la televisión.
Por cierto, si no estás al día con las tramas, mucho ojo con los SPOILERS.
Descanse en paz
Estamos terminando la primera temporada y la verdad es que ‘Juego de Tronos’ pinta bastante bien. Resulta emocionante y entretenida. Entonces, llegamos al capítulo nueve y se cargan a Ned Stark, el protagonista principal. ¿Cómo? ‘Baelor’ fue el episodio que nos mostró qué esperar de esta serie. Nadie estaba a salvo.
La que no arde
Para terminar de agarrarnos por las entrañas, tenemos el capítulo diez de la primera temporada, en el que Daenerys es condenada a la hoguera. Ya sabemos cómo se las gastan en la serie, así que no nos sorprende la muerte de la Targaryen. Pues no, lo que sucede es que Dany sobrevive al fuego… y da a luz a tres dragones bebé.
El “bebé” de Melisandre
Melisandre, la bruja roja de la que quedan muchos enigmas por resolver. Uno de los momentos más impactantes de la segunda temporada es cuando engendra una siniestra sombra que, poco después, acaba con la vida de Renly Baratheon.
La Boda Roja
Los Stark son la familia que más desgracias sufre por minuto. Menos mal que tenemos una boda para relajarnos un poco. Eso nos creíamos nosotros. El capítulo nueve de la tercera temporada dejó uno de los momentos con los que más hemos llorado: la muerte del joven Rey Lobo, de su esposa y de su madre. “Los Lannister envían recuerdos”.
La Boda Púrpura
Si vives en los Siete Reinos y te invitan a una boda, lleva armas, escudos y protector gástrico. En el arranque de la cuarta temporada, les tocó sufrir a los Lannister (ya era hora) con la muerte de Joffrey. Envenenado, los directores se recrearon con la deformación de un rostro que todos odiábamos.
Una ballesta y un baño
El gran Tywin Lannister recibe, por fin, su merecido al final de la cuarta temporada. No solo nos alegramos porque Tyrion se cobre su venganza asesinando a su padre, sino por la manera en que lo logra, mientras el patriarca hace sus necesidades en el retrete.
El primer vuelo
‘Juego de tronos’ nos ha acostumbrado a los salvamentos en el último minuto. Nuestro preferido es el del capítulo nueve de la quinta temporada (ay, esos mágicos capítulos nueve), cuando Daenerys está a punto de morir a manos de los Hijos de la Arpía. Drogón, el dragón perdido, vuelve para rescatarla. El corazón nos latía a mil mientras veíamos a la Madre de Dragones cabalgando a su hijo por primera vez.
Las dos vidas de Jon
La quinta temporada nos aplastó con un final terrible: la muerte de Jon Nieve. Para comenzar la sexta con buen pie nos esperaba uno de los grandes momentos de la serie. Melisandre se presenta ante la Guardia de la Noche y consigue resucitarlo. Nos rompimos las manos a aplaudir.
“Hold the door”
“Aguanta el portón”. Qué simpático nos resultaba este gigantón que solo sabía pronunciar su nombre: Hodor. El capítulo quinto de la sexta temporada revela la verdad. Es Bran el que provoca el shock emocional en Hodor al conectar al personaje del pasado con el del presente. Hodor contempla su propia muerte.
El adiós de Tommen
Dos grandes escenas conectadas. Si bien ver explotar el septo de Baelor a manos de Cersei es un gran momentazo, lo que de verdad nos dejó con la boca abierta fue su consecuencia. El karma se cobra un precio muy alto cuando el dulce Tommen decide suicidarse. La muerte de su tercer y último hijo es el peor castigo para cualquier madre.
Caminantes alados
Uno de los tres dragones ha muerto y no podemos estar más desolados. ¿Qué no? En el capítulo seis de la séptima temporada, el Rey de la Noche consigue resucitar a Viserion y convertirlo en un caminante más. El momento en que el ojo se abre y vemos la pupila azul hielo nos hizo presagiar el apocalipsis.
Aegon Targaryen
El final de la séptima temporada trajo la revelación más importante de la serie (y vaya si es difícil decir esto). Gran parte del universo de ‘Juego de Tronos’ se construye a través de este secreto: la rebelión de Robert, el compromiso de Eddard, el destino del reino. Jon no es un bastardo, sino el hijo de Raeghar Targaryen y Lyanna Stark. Y, por tanto, el verdadero heredero del Trono de Hierro.
Arya, a sus pies
El tercer capítulo de la octava temporada se recordará como una de las mejores batallas de la historia del audiovisual. Cuando todo está perdido, ¿quién salvará a la humanidad? Arya Stark, la niña superviviente, acabó con el Rey de la Noche en una escena para enmarcar. Los espectadores lo celebramos como si fuera un gol en la final del mundial de fútbol.
La locura de los Targaryen
Ya nos habían dicho que los Targaryen tenían una tara genética que trastornaba sus mentes. Pero ver enloquecer a nuestra Daenerys… Qué horrible fue la destrucción de Desembarco del Rey. El capítulo quinto de la octava temporada se ha convertido en el más controvertido de la serie. Y tú, ¿a favor o en contra?
Jon y Daenerys
Cuando esta pareja nació, dábamos palmas con las orejas. Los dos grandes héroes de ‘Juego de Tronos’ unidos por el amor. Pues qué bien todo, ¿no? Los productores tenían una idea muy distinta sobre el final de su romance. Jon se ve obligado a asesinar a su reina por el bien del destino de los Siete Reinos.
Y el rey es…
El gran enigma de la serie era ¿quién se sentará en el Trono de Hierro al final de la serie? Pues nadie, porque el trono es destruido por Drogon. Pero el rey, el rey que ha de romper la rueda y curar las heridas de los Seis Reinos, es Bran el Roto, el Cuervo de Tres Ojos que conoce el pasado y el futuro y que es elegido por consenso.
Imágenes | IMDB
