Exploramos un género cinematográfico lleno de aventuras e historias de desarrollo personal.
Las road movies empiezan a tener presencia en el cine tras la Segunda Guerra Mundial, cuando, rescatando la idea de clásicos como ‘La Odisea’ de Homero y el propio ‘Don Quijote de la Mancha’ de Miguel de Cervantes, se perfilan como una forma de narrar el recorrido de sus protagonistas. Y no pasa de moda. Uno de los últimos ejemplos viene firmado por Álex de la Iglesia: ‘El cuarto pasajero’, una comedia con varias caras conocidas que promete hacernos pasar un buen rato.
Partiendo de este último estreno, repasamos algunas historias sobre ruedas que nos invitan a viajar y, por supuesto, a emocionarnos durante ese trayecto por carretera.
‘El cuarto pasajero’
Julián (Alberto San Juan) es un divorciado que, para compartir los gastos de sus viajes, recurre a una aplicación para viajar con desconocidos. Pero no todos los pasajeros son nuevos para él: Lorena (Blanca Suárez) es ya una pasajera habitual de la que, además, está enamorado en secreto. Cuando por fin decide aprovechar uno de sus trayectos juntos para sincerarse, completan su oferta de viaje dos inquietantes pasajeros (Ernesto Alterio y Rubén Cortada) que provocarán un cambio de planes.
‘Thelma y Louise’
Es una de las road movies por excelencia, además de un icono cinematográfico del feminismo con dos heroínas que pasaron a la posteridad, encarnadas por Susan Sarandon y Geena Davis. Thelma es una mujer casada con un hombre machista y Louise una camarera en una relación algo frustrada. Para evadirse de sus rutinas deciden hacer un viaje juntas que se convertirá en una huida hacia adelante.
‘Pequeña Miss Sunshine’
Olive (Abigail Breslin) es la pequeña de los Hoover, cuya ilusión es participar en un concurso de belleza para niñas en California (Estados Unidos). Un golpe de suerte hace que resulte seleccionada y, conmovidos por su ternura y motivación, todos los miembros de su peculiar familia deciden acompañarla en un largo viaje en su destartalada Volkswagen. Esto incluye a su padre (Greg Kinnear), un fracasado que imparte cursos sobre cómo alcanzar el éxito; su sobrepasada madre (Toni Colette); su misterioso hermano que ha decidido dejar de hablar (Paul Dano); su tío (Steve Carell), que se recupera de un suicidio frustrado y su malhablado abuelo (Alan Arkin), que es, además, su mayor fan.
‘Las uvas de la ira’
John Ford se encargó de hacer la adaptación cinematográfica de la novela con la que John Steinbeck recibió el Pulitzer en 1940. En ella narra la historia de los Joad, una familia de granjeros de Oklahoma (Estados Unidos) que, tras el crack del 29, se ve obligada a emigrar a la tierra prometida, California, para escapar de la sequía, el hambre y la pobreza.
‘Diarios de motocicleta’
Gael García Bernal se mete en la piel de Ernesto Guevara cuando era un joven estudiante de medicina para recorrer en moto la América Latina junto a su amigo Alberto Granado (Rodrigo de la Serna). Juntos descubren la complejidad de cada territorio y sus gentes en un interesante retrato sociológico de la situación que impulsa los ideales del revolucionario Che Guevara.
‘Amor a quemarropa’
Clarence (Christina Slater) es un joven solitario que celebra su cumpleaños viendo películas de kung-fu en un cine de Detroit (Estados Unidos). Allí conoce a Alabama (Patricia Arquette), una prostituta pagada por su mejor amigo a modo de regalo de la que se enamora. Aquí comienza un viaje de huida para alejarla de la prostitución en el que una maleta llena de cocaína solo complica las cosas.
‘Corazón salvaje’
David Lynch dirige esta road movie en la que no falta nada: amor, crimen, peligro, música y Nicolas Cage. Durante un permiso carcelario, Sailor va a visitar a su novia y ambos deciden huir a California para poder estar juntos. No será fácil: la madre de ella se opone a la relación y envía a un sicario a que mate a Sailor.
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