Los veranos tienen un aroma vintage que nos remite irremediablemente a nuestra infancia. Llegan los meses de julio y agosto y nos acordamos, claro, de las piscinas con esos carteles ilustrados de qué hacer y qué no si tienes menos de 10 años y osas bañarte solo, los empachos de Frigopie, las tres horas de digestión (¿en serio, mamá?), las siestas con el Tour y la Vuelta… Y, claro, las tardes de cine.
Porque si el cine es un pasatiempo mágico en cualquier época del año, en verano es la guinda del pastel. Al aire libre en la plaza del pueblo, en el salón con los primos o en un rato de relax solo en tu salón –ahora que las bondades de la televisión a la carta son unas fieles compañeras de batallas-, cualquier momento es bueno para disfrutar del séptimo arte.
Especialmente, para ponerse al día con los clásicos de la gran pantalla. Sí, ponerse al día: en la era de ‘Juego de Tronos’, Netflix y las novedades que te contamos a diario en Pop TV, a veces no tenemos tiempo para disfrutar de esas cintas de fama y premios que se colocan en la estantería de los imprescindibles que todo cinéfilo debe haber visto.
El verano es el momento ideal para deshacerse de esa losa cooltureta que supone no haber visto ciertas cintas. Y, además, un buen puñado las puedes disfrutar en la mejor calidad: en 4K y disponibles en el videoclub de Orange. Pequeño padawan del cine clásico, aquí va una lista de musts a los que debes darle al play en este estío sofocante.
‘Tootsie’
Mucho antes que ‘Birdman’, una película tuvo como protagonista a un actor en paro por su inaguantable carácter. Aquella fue ‘Tootsie’ y nos mostró a Dustin Hoffman –olvida sus registros de ‘Kramer contra Kramer’, ‘El graduado’ o ‘Todos los hombres del presidente’- en la piel de un intérprete que se queda sin trabajo y comienza a trabajar como actriz.
Con looks y peinados ochenteros incluidos, la personalidad del protagonista se desdobla en una versión masculina –la que le ha hecho fracasar- y una femenina –que lo está llevando a la fama-. Hasta ahí todo bien… pero entonces el personaje de Hoffman se enamora de su compañera de reparto en la serie para la que está trabajando y el enredo está servido.
‘Dentro del laberinto’
Si hablas con un fan de David Bowie y le dices que no has visto ‘Dentro del laberinto’, te mirará como si le hubieses dicho que no has oído nunca ‘Starman’. Es decir, con cara de: “sa-cri-le-gio”.
Puedes ponerle remedio fácilmente gracias al videoclub de Orange viendo esta cinta de fantasía que nos habla de una niña que se adentra en un laberinto en busca de su hermano pequeño, quien ha sido raptado por el rey de los duendes, el mismísimo Bowie.
Si la película, uno de los clásicos del cine indie, estéticamente es muy llamativa, en 4K lo será aún más. Y sus canciones, buena parte de ellas interpretadas por el Duque Blanco, envolverán tu salón en un espíritu entre mágico, disco y onírico.
‘Cazafantasmas’
Si lees estas palabras y automáticamente canturreas la sintonía de esta serie, eres de los fans de la cinta. Si solo te suenan los ‘Cazafantasmas’ por las referencias de ‘Stranger Things’, ha llegado el momento de que descubras el porqué de la fascinación de esos avispados niños por esta historia.
Con Bill Murray a la cabeza –antes de que el actor se convirtiera en el intérprete de referencia de Wes Anderson y, por tanto, en icono millennial– esta serie puso en el imaginario común los conceptos de parapsicología, manifestaciones ectoplasmáticas y demás conceptos que hoy Íker Jiménez maneja a la perfección. Si te gusta el universo de la ciencia ficción, te chiflará.
‘El puente sobre el río Kwai’
Un clásico entre los clásicos del cine es ‘El puente sobre el río Kwai’, pues esta cinta no es uno de los imprescindibles de la cultura pop de finales del siglo XX, sino de la cultura cinéfila del Hollywood dorado. Con la Segunda Guerra Mundial como telón de fondo, nos cuenta la historia de unos militares británicos prisioneros en Japón que deben construir un puente sobre el río Kwai de Tailandia para que pase el ferrocarril que habrá de transportar los víveres nipones.
Más allá de la historia en sí, la intrahistoria de esta cinta es, también, digna de conocer. La película está basada en la novela homónima escrita por Pierre Boulle, pero sus guionistas, Carl Foreman y Michael Wilson, no fueron reconocidos como tales hasta 1985, pese a que el filme se rodó en 1957.
¿A qué se debe? A la caza de brujas comandada por el senador McCarthy que tomó Hollywood en los años 50 y que persiguió a todos aquellos sospechosos de ser aliados del comunismo en una de las etapas más tensas de la Guerra Fría. Por eso, entre otras cosas, merece la pena visualizar esta producción.
‘Taxi Driver’
Tiempo antes de que un serio Ryan Gosling –cuándo no lo es, seamos sinceros- se pusiera a conducir de noche a toda velocidad en ‘Drive’, Robert de Niro hizo lo propio en ‘Taxi Diver’. Él interpretaba a un taxista que trabajaba en la noche neoyorquina de los años 70 llevando pasajeros de un lado a otro y moviéndose por los ambientes más turbios de la ciudad.
Esta cinta, que ganó la Palma de Oro en Cannes en 1976, está considerada una de las mejores obras de su director, Martin Scorsese. Su estética oscura, sus toques punk, su violencia, su ritmo, sus frases para pensar (ese De Niro mirándose al espejo y preguntando “¿estás hablando conmigo?”) y la aparición de esa jovencísima Jodie Foster contribuyen a la merecida clasificación. Y, en 4K, cada uno de esos matices se aprecia mucho mejor.
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