Su nominación al Goya a mejor actor revelación por su papel en ‘Amar’ le pilló ensayando. Pol Monen siempre ha tenido claro que, para triunfar, el talento tiene que ir acompañado de trabajo. Lo de este joven de 23 años es un no parar. Es uno de los protagonistas junto a José Coronado de ‘Tu hijo’, la película de Miguel Ángel Vivas en la que Orange ha colaborado y cuyo rodaje está en marcha.
La cosa no queda ahí. El joven catalán también ha participado en la serie de Telecinco ‘Vivir sin permiso’, que está pendiente de estreno, y actualmente está rodando otra más para Playz. Mientras tanto, se sigue formando como actor en Estudio Corazza y todavía le queda tiempo para practicar boxeo y ver mucho, mucho cine. Hemos hablado con Pol Monen de secretos de rodaje, de su admiración por José Coronado, de la vida después de los Goya y de mucho más.
Estuviste nominado al Goya como mejor actor de reparto por ‘Amar’. ¿Dónde estabas y cómo reaccionaste cuando te comunicaron la nominación?
Estaba ensayando con mi pareja de escena una obra de teatro que hicimos con el Estudio Corazza, en Conde Duque. Me llamaron y me dijeron que me fuese a la Academia porque me acababan de nominar y fue como “Whaaat!?”. Me fui directo a allí tal y como estaba. Yo sabía que había alguna posibilidad porque se hacen unos rankings y estaba en muchos, pero la mayoría de veces el 50% de los rankings se equivocan, así que no me quise confiar. Dije “que sea lo que tenga que ser. Si es, de puta madre, y si no, a seguir trabajando”.
Imaginamos la ilusión que le hace a un actor, y más siendo tan joven, ser nominado al Goya, ¿pero luego compensa? ¿Recibe un actor más ofertas de trabajo después de la nominación o esto es como Eurovisión?
En mi caso sí que me está ayudando. Como mínimo estar nominado a un Goya te sitúa un poco en el mapa. Hay mucha gente que no te conoce y de repente puede ser que te conozcan un poco más. En ese aspecto hay más público que ve tu trabajo y, si les gusta, te quieren llamar. Es guay porque te da un poco más de visibilidad. No creo que la nominación sea una garantía de trabajo para nadie, pero lo que hablan de la maldición de los Goya, de que si lo ganas no vas a trabajar, es una tontería. La industria de por sí ya es muy complicada y nadie te garantiza trabajo nunca.
Ahora mismo estás inmerso en el rodaje del thriller ‘Tu hijo’ de Miguel Ángel Vivas. Todavía se sabe muy poco sobre la película y tenemos mucha curiosidad. Avánzanos algo, ¿cómo es tu papel en el filme y qué historia podremos ver en él?
Te puedo contar muy poco. Hay un giro en la historia que flipas. A mi personaje en la película le pegan una paliza. El padre, que es José Coronado, es un médico muy reputado que decide investigar por su cuenta lo que me ha pasado. Hay un trasfondo muy importante de la película que hará al espectador plantearse quiénes son los buenos y quiénes son los malos. Es de los personajes más difíciles que he hecho. Tiene muchos matices. Ha sido complicado porque no tengo muchas escenas y en las que aparezco tengo que contar muchas cosas en poco tiempo.
Por cierto, en ‘Tu hijo’ compartes rodaje con un grande del cine como es José Coronado y también has grabado junto a él la serie ‘Vivir sin permiso’. ¿Cómo es trabajar con Coronado y qué has aprendido de él?
José Coronado es una persona muy generosa con los actores. He aprendido muchas cosas de él, más que a través de consejos, viéndole trabajar. Es muy generoso. Se rompió una costilla durante el rodaje y estuvo grabando el día entero sin quejarse. Cuando es tu plano da al cien por cien también. Al principio me imponía bastante porque siento mucha admiración hacia él, pero te hace las cosas muy fáciles y no marca nada de distancia. Es un hombre muy cercano. Nos hemos entendido bastante bien. Entré en el proyecto, en parte, gracias a Coronado. Aunque en la serie ‘Vivir sin permiso’ no tengo trama con él, me vio en los capítulos y le habló de mí a Miguel Ángel Vivas. Le estaré eternamente agradecido porque me encanta el personaje que hago en la peli.
Estamos seguros de que en los rodajes, además de trabajar muchísimo, vivís anécdotas de lo más divertidas o sorprendentes, de esas que os quedáis para vosotros y no trascienden. ¿Recuerdas alguna en especial del rodaje de ‘Tu hijo’?
El primer día vivimos una escena muy importante porque presenta a los dos personajes, al de Jaime y al de Marcos. En ella aparecen padre e hijo corriendo. Para el director era muy importante porque quería que se contara la relación que tenemos. Era un plano secuencia de unos dos minutos y había que contar bastantes cosas. Notaba que había cierta separación entre José y yo… y le di un abrazo. Me di ese permiso. Nos recordamos un poco quiénes éramos en ese momento de la historia, la escena salió y fue esa la buena después de tres intentos. Fue todo muy fluido y el director quedó encantado. Es que a mí José al principio me imponía un poco y al poder abrazarle como un hijo abrazaría a un padre, lo humanicé mucho más.
Conocemos muy bien tu faceta profesional, pero seguro que hay muchos fans que se preguntan qué hace Pol Monen cuando tiene tiempo libre. ¿Qué te gusta hacer cuando no estás rodeado de cámaras y focos?
Cuando no estoy rodando me estoy formando. Estoy ahora en Corazza, en mi último curso. También me gusta mucho estudiar idiomas. He estudiado hebreo durante cuatro años porque me gusta mucho la cultura judía. Además hago deporte, estoy muy motivado ahora mismo con el boxeo. También me gusta mucho leer y ver películas. Voy mucho al cine, la mayoría de veces solo. Voy varias veces a la semana cuando puedo.
De pequeño ya apuntabas maneras de actor. Con 10 años participaste en la película de Almodóvar ‘La mala educación’. ¿Qué recuerdas de aquel rodaje?
Fue una figuración, ¡solo salgo un segundo y medio! (ríe) Yo sabía quién era Almodóvar, aunque no había visto demasiado, solo ‘Todo sobre mi madre’. Sí que sabía que él era un director muy importante. Fue una experiencia muy bonita porque fue mi primer rodaje. Lo guardo como algo muy especial, el ver cómo trabajaba un equipo, cómo dirigía un director… Un proyecto tan grande como aquel despertó en mí algo. Cuando terminé de hacer la figuración, un día estaba paseando a mi perro por mi pueblo, Pineda de Mar, y me encontré a la chica que se encargaba de la figuración. Me llevó al rodaje. Estaban grabando en una pastelería de al lado de mi casa y allí pude conocer a Gael García Bernal y a Fele Martínez y verles trabajar un poco. A los pocos meses me apunté a teatro en una escuela de Barcelona y era el momento de la semana que más disfrutaba. Nadie de mi familia es actor. Fui haciendo cositas, pero fue más de más mayor cuando decidí que quería ser actor y me lo tomé como más en serio.
¿Te gustaría volver a trabajar con Pedro Almodóvar?
Me encantaría, por supuesto, es uno de mis directores favoritos. Está haciendo cosas muy buenas. Me gustó mucho ‘Julieta’. Ya he visto todo su cine. Una de las cosas de ser tan joven es que… ¡hay tanto cine bueno por ver! A veces, buah, descubres un director y tienes días y días de ver cine bueno, eso es guay.
¿Tienes alguna manía de actor antes de salir al escenario o de empezar a rodar?
Sí, soy bastante supersticioso. Subrayo siempre en amarillo. También tengo personas concretas a las que les pido pasar texto, solo algunas, no cualquier persona. Y nunca cuento si he hecho un casting, pero más que por superstición, por el hecho de que la gente no maree con “¿te han cogido, te han cogido?”, que es algo que te crea una presión extra. Antes de rodar, más que hacer un ritual concreto, lo que hago es preparación. Soy bastante metódico, bailo durante media hora, me ayuda a calentar un poco el cuerpo. Luego preparo la voz con ejercicios concretos.
Son muchos los actores españoles que dan el salto fuera de España. Pongamos que te dejan elegir un proyecto, una serie internacional de las que ya están en marcha, ¿en cuál te gustaría participar?
Hay varias que me gustan. ‘Narcos’ es muy guay. Me gustaba muchísimo ‘House of Cards’, ¡pero después de lo de Kevin Spacey…! (ríe). En realidad soy más de cine que de series, aunque se están haciendo algunas muy buenas en los últimos tiempos. Hay muchas que me gustan, como ‘Snatch’. También estoy descubriendo series más antiguas que estoy viendo últimamente como ‘Angels in America’. Este mes voy a empezar a rodar una serie para Playz llamada ‘Bajo la red’.
Antes algunos actores tenían ciertos prejuicios a la hora de participar en una serie al considerar que era algo inferior a hacer cine. ¿Crees que eso ha cambiado ya?
Sí, totalmente. Creo que es una tontería eso. El talento también está en las series. Es más importante la historia que el formato. Sí que es verdad que para mí el cine es algo más especial como espectador. Hay dos horitas para contar la historia y llega más directa. Pero si la historia es buena, me da igual si es serie o película.
Has trabajado en varias series de televisión, pero también has hecho cine y teatro. Mójate… Si tuvieras que elegir uno, ¿con qué ámbito te quedarías?
Cine, que es lo que siempre he querido hacer desde niño, pero quiero hacerlo todo, también teatro. No desprecio nada. Si el personaje es bueno y la historia me gusta, me tiro de cabeza, da igual lo que sea.
¿Y musicales?
¡Es que canto fatal! (ríe)
Tu compañera en ‘Amar’, María Pedraza, era muy popular en Instagram cuando saltó al cine. Tú también eres muy activo en redes sociales. ¿Es muy importante para un actor estar en ellas de cara a promocionar su trabajo y ganarse el cariño del público?
Puede que las redes sociales tengan bastante importancia hoy en día, pero creo que no es donde un actor debería poner el foco. Donde te lo tienes que currar es en los papeles que haces. Lo de Instagram es una distracción muy grande a veces. No reniego, tengo Instagram y soy activo en él. Está bien para contar qué estás haciendo, pero una parte de tontería que no me gusta demasiado. Dos de mis actores favoritos de mi generación no tienen Instagram. Uno de ellos acaba de rodar una peli en Hollywood y el otro también es increíble… ¡y no tiene Instagram! Es una chorrada, ¿no les van a coger por eso? El talento no tiene que ver con eso. No creo que un actor tenga que poner toda su energía en los filtros de Instagram.
Pol, tienes 23 años, cuentas con una nominación a los Goya, has trabajado ya con Coronado, tienes éxito en redes sociales… ¿Cuál es tu secreto y qué te queda por hacer?
¡Me queda aún mucho! Y respecto al éxito, hay una parte de suerte, pero hay una parte mucho más grande de trabajo detrás en mi caso. Los papeles han empezado a llegar cuando yo me lo he empezado a currar y me he formado como actor. Me preparo los personajes que hago y no espero a la gracia divina o a que el talento lo solucione todo. El talento está bien pero cuando va acompañado de trabajo, que es muy necesario.
¿Qué retos te has puesto a ti mismo?
Yo me quito toda esa exigencia de “tengo que llegar aquí”. Trato de disfrutar del momento. Me están pasando cosas muy buenas que había querido desde hace muchos años, me están llegando oportunidades muy buenas y voy al día con lo que me llega. La vida ya me ha sorprendido bastante últimamente. Me gusta este camino y me voy a dejar llevar un poco más.
Eres actor pero estudiaste Periodismo. ¿Lo cambiarías por la interpretación?
Yo quiero ser actor. Estudié Periodismo porque me gusta mucho leer y escribir. Lo que me gustaría hacer a medio camino entre el periodismo y la actuación es escribir guiones. En casa hago algunos intentos.
Si pudieras elegir cuatro actores con los que protagonizar una serie o película, ¿cuál sería ese reparto ideal con el que compartirías proyecto?
Javier Bardem, Jake Gyllenhaal, Tom Hardy y Meryl Streep.
Como ya sabes, Orange ha colaborado en la producción de Tu hijo. ¿Qué te parece el papel de teleoperadoras como Orange en el mundo del cine y las series?
¡Yo soy cliente de Orange! Me parece muy bueno el papel que hacen porque están produciendo cosas muy interesantes, ya no solo por el hecho de que se lancen a producir cine y series, sino porque lo que están haciendo realmente me parece de muy buena calidad. Veo muy bien que haya empresas que inviertan en la industria del cine. Es muy positivo el papel que hacen.
Fotografías | Clara Larrey
