Desde que el maestro Splinter las encontró en una alcantarilla cubiertas de una viscosa sustancia verde, las Tortugas Ninja han combatido sin descanso el crimen en la ciudad de Nueva York. Y lo han hecho en papel, en la televisión y en la gran pantalla. Ahora regresan a Nickelodeon con la serie ‘El ascenso de las Tortugas Ninja’.
Pero estos personajes no han tenido siempre un público infantil. Hubo un tiempo en que sus historias eran más violentas y trataban temas como la psicología, la religión o el respeto al medioambiente. Un tiempo en que sus personajes ni siquiera comían pizza y estaban en blanco y negro.
Un cómic pensado para una sola edición
Las Tortugas Ninja (o, siendo fieles a su título original, ‘Las Tortugas adolescentes mutantes ninjas’) nacieron, como tantos otros superhéroes, en un papel. Concretamente, en las viñetas de un cómic en blanco y negro creado por Peter Laird y Kevin Eastman en 1984. La historia se había concebido como un homenaje-parodia a Frank Miller, el famoso dibujante de Marvel.
Peter Laid y Kevin Eastman no imaginaron el éxito que se avecinaba cuando trazaron los primeros bocetos de estos superhéroes mutantes. De hecho, la primera tirada era de 3.000 ejemplares y la idea era que la aventura quedase ahí. Pero estamos hablando de los años 80. Aunque la edad dorada de los cómics había quedado atrás, el mundo de los superhéroes seguía teniendo su público.
Esta primera edición fue anunciada en una guía de viñetas gráficas. Se generó una gran expectación y una vez a la venta se agotó rápidamente, por lo que se lanzó una segunda tirada que también se vendió con éxito. La historia, que había sido imaginada como algo puntual, pasó a ser la primera de una larga lista.
Cuatro mutantes inadaptados y su maestro ninja
Dado que el cómic original no tenía colores, no era tan fácil diferenciar a las cuatro Tortugas Ninja. Sus creadores tuvieron que dar a cada una una personalidad. Y nombres. En este caso, los de cuatro artistas del Renacimiento: Leonardo, Michelangelo, Donatello y Raphael.
En el cómic y al contrario que otros superhéroes, los cuatro hermanos solo actuaban cuando era verdaderamente necesario. El resto del tiempo lo pasaban ocultos en el intrincado alcantarillado de Manhattan acompañados del maestro Shredder, la rata que les enseñó todo lo que saben sobre las artes marciales y el mundo en general.
Su condición de mutantes, insistía el maestro, las convertía en marginados. Al igual que a Daredevil, un accidente había terminado derramando líquido radiactivo sobre las cuatro tortugas. Pero en lugar de dejarlas ciegas, les dio una forma más humana. Mitad tortugas, mitad personas. Por ello su ascenso a la superficie se limitaba a la noche, cuando no podían ser descubiertas. Y siempre y cuando fuese necesario combatir a sus enemigos, claro está. Especialmente al Clan del Pie (de nuevo una parodia al Clan de la Mano de ‘Daredevil’).
Las primeras aventuras de las Tortugas Ninja iban dirigidas a un público adulto. Hubo que esperar su estreno en televisión para ver su versión más infantil, en la que ya nos encontramos la mítica imagen de los cuatro hermanos comiendo pizza en el sofá.
La historia de las Tortugas Ninja en la pantalla
En 1987, tres años después del lanzamiento del primer cómic, Leonardo, Michelangelo, Donatello y Raphael debutaron en televisión. Sus aventuras se emitieron durante nueve años en la cadena estadounidense CBS a lo largo de 198 episodios. En España, sus aventuras se disfrutaban en La 2 de TVE a grito de “¡Cowabunga!”.
Desde finales de los 80 hasta el estreno de ‘El ascenso de las Tortugas Ninja’ en Nickelodeon, las tortugas protagonizaron diferentes series de televisión (aunque alguna no se llegó a emitir en España).
Estos mutantes tuvieron tanto éxito que la primera película de cine se estrenó ya en 1990. Se titulaba ‘Las tortugas ninja’ y seguía la trama del primer cómic, aunque con un toque de humor más propio de la serie de televisión. Logró recaudar más de 200 millones de dólares en todo el mundo.
Al igual que en la televisión, los ninja repitieron en la gran pantalla. En 2007 y celebrando su 30 aniversario se estrenó ‘TMNT: Tortugas Ninja jóvenes mutantes’. Y en 2014 ‘Tortugas Ninja’, una película de producida por Nickelodeon y Platinum Dunes en la que Megan Fox da vida a April O’Neil, la periodista del Canal 6 que investiga al Clan del Pie y ayuda a las tortugas en su lucha contra el crimen.
Videojuegos, figuras y demás merchandising
Como no podía ser de otra manera, más de 30 años de tortugas mutantes han dejado un largo rastro de videojuegos, juguetes, figuras de coleccionista, ropa y una infinidad de objetos con las cuatro figuras verdes (y sus antifaces). Los primeros videojuegos se lanzaron en 1989 de la mano de Konami y Nintendo.
Su afición por la comida y la música de moda les han dado puntos para convertirse en unos de los personajes favoritos de diferentes generaciones desde los 80 hasta hoy. Y es que estas tortugas tienen algo que las diferencia de otros superhéroes: solo trabajan cuando es necesario hacerlo y se toman los problemas con humor. El resto del tiempo disfrutan del tiempo libre y viven cómodamente bajo el suelo de Nueva York.
Imágenes | Youtube, Nickelodeon
