En una temporada en la que la producción de nuevas series y temporadas se ha visto mermada por la situación global, las televisiones parecen haber encontrado la horma de su zapato en las ficciones de países vecinos. Este es el caso de ‘Floodland’, un inquietante thriller que se desarrolla entre la frontera de Holanda y Bélgica y que se incorpora ahora a la programación de Sundance TV, disponible en Orange TV.
Una adolescente que aparece en misteriosas circunstancias, una policía con un sexto sentido para los casos y muchos interrogantes por resolver son parte de la carta de presentación de esta serie, que estrenará el primero de sus ocho episodios el día 18 de marzo a las 22:30 horas. ¿Su trasfondo? Un drama entre la frontera belga-holandesa en el que las diferencias culturales se palpan continuamente, incluso cuando parece haber un asesino en serie de por medio.
Las pruebas que la marea arrastra
‘Floodland’ se desarrolla en un pequeño pueblo de paisajes pantanosos en el que las idas y venidas de la marea forman parte del día a día de sus habitantes. Casi por casualidades del destino, a la vez que llega a la localidad una policía proveniente del mundo aparte que es Rotterdam (Holanda), un misterioso barco aparece encallado a las orillas del río que separa Holanda y Bélgica, con agujeros de bala en sus paredes y marcas de sangre.
El departamento de policía del pueblo, que parece más inmerso en celebrar una fiesta de jubilación que en hacer su trabajo, presta poca atención a las continuas advertencias de la inspectora Tara Dessel (Jasmine Sendar) sobre el caso. Incluso esta se encontrará todo un impedimento a la hora de analizar el barco, y es que las repentinas subidas de la marea impiden que la policía científica obtenga datos concluyentes y fiables.
De forma paralela, también en la zona irrumpe una joven mojada por las aguas, herida, exhausta y con síntomas claros de estrés postraumático. Una vez hospitalizada, las autoridades deciden contactar con el psicólogo Bert Dewulf (Koen De Bouw), que reside en el lado belga del río y que se traslada hasta la zona para evaluar la situación. El destino (y las pesquisas policiales) harán que su camino se cruce con el de la inspectora Dessel, que sospecha que ambos casos están directamente relacionados.
De las fronteras físicas a las fronteras culturales
Resulta muy interesante que el recurso de las fronteras entre países siga dando para tantas tramas en la industria audiovisual. A través de ellas se pueden descubrir realidades políticas que afectan a lugares de todo el mundo, como se ve constantemente en el caso de Estados Unidos y México, pero también como plantearon los creadores de la mítica serie ‘Bron/Broen’ sobre la frontera sueco-danesa y los productores de la ficción ‘El Niño’ (disponible en Orange TV a través de Netflix), que muestra el abismo cultural que hay entre España y Marruecos.
El hecho de que ‘Floodland’ sea precisamente una coproducción le da mucho más simbolismo, sobre todo por ser dos países que no resolvieron sus conflictos fronterizos hasta el año 2016. Es más, el origen de este acuerdo fue precisamente la aparición de un cadáver en una pequeña península del río que solía separar ambas naciones. Holanda, por su parte, no podía investigar el caso porque no estaba en su territorio y, del mismo modo, Bélgica tuvo que emplear multitud de recursos para trasladar sus efectivos hasta la zona.
Esta es una de las múltiples historias curiosas que rodean a la división de estos países. Una especie de coexistencia pacífica con pequeños roces que se refleja a la perfección en ‘Floodland’, sobre todo cuando el centro de la conversación es debatir sobre dónde está la mejor cerveza.
Sin embargo, también en la serie se perciben otro tipo de fronteras que no son tan físicas, como la que separa a Tara Dessel de su antigua vida en Rotterdam e, incluso, la forma con la que se cuestiona continuamente su validez como mujer policía en un cuerpo formado por hombres. También, aunque unidos en su labor, se intuyen bastantes diferencias entre la practicidad de la inspectora holandesa y el sexto sentido del psicólogo belga, que se preocupa más por el bienestar de su paciente que por capturar al delincuente.‘Floodland’ es un viaje repleto de misterio, días oscuros y, sobre todo, mucho barro, que se inspira en todas estos límites tanto físicos como culturales. Ocho episodios cargados de intriga en una producción independiente digna de la programación de Sundance TV. Perfecta para disfrutar un excelente thriller y descubrir lo mejor de las ficciones vecinas actuales.
Imagen: Sundance