En el complicado arte de la risa, las mujeres tampoco lo han tenido fácil para hacerse un hueco en la pantalla. Sobre todo en ámbitos como los clubes de stand-up comedy estadounidenses, por los que es casi obligatorio pasar antes de entrar en el selecto club de humoristas que copan las televisiones del país.
Este es un dilema feminista que la ficción ha sabido recoger muy bien en una de las series del momento, ‘La maravillosa señora Maisel’, que acaba de estrenar su cuarta temporada en Amazon Prime Video (disponible en Orange TV). En sus episodios, una mujer con un talento innato para los monólogos intenta superar las barreras impuestas por la sociedad de los años cincuenta, que no concibe que una ama de casa deje a sus hijos para subirse a los escenarios de un club neoyorquino.
La suya no es una simple ficción, sino que podría considerarse como un relato basado en hechos reales. No son pocas las ocasiones en las que las mujeres han tenido que demostrar su valía para la comedia (en concreto, hace unos meses, las cómicas españolas libraron su propia batalla frente a los que ponían en entredicho su talento). En la historia de la televisión han sido muchas las referentes que han sabido destacar y romper los estándares de cada época. Estos son algunos de los rostros femeninos de la comedia que han marcado la historia del humor.
Lucille Ball
Lucille Ball no fue la primera mujer cómica de la televisión, pero sí la primera que batió todos los récords de audiencia. La protagonista de ‘I love Lucy’ estaba destinada a ser toda una grande de su tiempo y, de hecho, fue descubierta mientras desarrollaba un papel similar en un programa de radio de la CBS. Por aquel entonces, es probable que nadie imaginara que su serie iba a convertirse en un fenómeno de la televisión y que estaría en antena durante nueve temporadas. Un éxito que casi se vio truncado cuando la actriz fue acusada de pertenecer al Partido Comunista, lo que se puede entender muy bien viendo la cinta ‘Ser los Ricardo’, disponible en Amazon Prime Video, por la que Nicole Kidman y Javier Bardem están nominados al Óscar.
Carol Burnett
Si Lucille Ball fue la comediante por excelencia de los cincuenta, el rostro que más risas generó en los sesenta fue Carol Burnett. Al igual que la ficticia señora Maisel, la cómica empezó sus andaduras en clubes nocturnos y, más tarde, hizo su debut en programas televisivos dirigidos por hombres. En 1966 consiguió su propio espacio, ‘Carol Burnett Show’, que estuvo en antena durante 278 episodios y por el que la actriz ganó un total de cinco premios Emmy. El programa también sirvió de impulso para otras cómicas destacadas del momento, como Joan Rivers, que logró su propio programa de variedades y entrevistas ya en los años ochenta.
Roseanne Barr
Roseanne y la serie que llevaba su nombre fue uno de los fenómenos televisivos más destacados de los años ochenta y noventa. Permaneció diez temporadas en antena y conquistó a la audiencia de toda una generación por su historia, centrada en una familia de clase trabajadora, y por el talento para hacer reír de su protagonista. Al finalizar la serie, en 1997, Barr retomó su carrera como monologuista en bares y lo compaginó con diversos proyectos paralelos como actriz de cine, presentadora de realities e, incluso, aspirante a la presidencia.
Julia Louis-Dreyfus
Su llegada al estrellato fue con la serie ‘Seinfeld’, disponible en Orange TV a través de la plataforma Netflix. Aunque, en realidad, sus inicios están relacionados con el programa ‘Saturday Night Live’, la factoría de comediantes más importante de la televisión estadounidense. Hoy en día, Julia es la actriz que más veces ha recibido el premio Emmy y es considerada casi una eminencia de su género (lo suficiente como para hacer un divertidísimo sketch bromeando sobre su último día ‘deseable’ en el programa ‘Inside Amy Schumer’).
Ellen DeGeneres
La conocida presentadora del magazine diario que más celebrities recibe por semana, ‘The Ellen Show’, también fue conocida en su día por sus monólogos y por una serie de televisión que llevaba su nombre. ‘Ellen’ pasaría hoy inadvertida, pero en su momento se convirtió en historia de la televisión por ser el escenario en el que la humorista hizo pública su orientación sexual. Una revelación que en su momento le cerró muchas puertas, pero que más tarde la convirtió en todo un referente LGBT.
Tina Fey
Un rostro habitual entre las estrellas de ‘Saturday Night Live’ (imposible olvidar su imitación de Sarah Palin), pero que también ha sabido labrarse una importante trayectoria como actriz, guionista y directora. Se encuentra detrás de producciones de humor como ‘Chicas Malas’, que está disponible para alquilar en Orange TV, y ‘Unbreakable Kimmy Schmidt’, una divertida serie de cuatro temporadas que se puede ver a través de Netflix. Tan solo dos ejemplos del tipo de comedia ácida, sin límites y con un punto feminista que la humorista abandera.
Amy Poehler
La protagonista de ‘Parks and Recreation’ ha sido, en diversas ocasiones, una de las compañeras inseparables de Tina Fey. Se les ha podido ver juntas colaborando en series y películas, pero también recibiendo todas las alabanzas por conducir galas de premios. Poehler es conocida por su faceta como actriz de comedia, aunque también tiene experiencia como guionista (por ejemplo, en la serie ‘Muñeca Rusa’ de Netflix) y directora. Su proyecto más reciente es un documental dedicado al matrimonio de Lucille Ball, titulado ‘Lucy and Desi’, que acaba de incorporarse a Amazon Prime Video y que es perfecto para complementar con ‘Ser los Ricardo’.
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