La historia y la carrera de Jane Campion es la de la directora que siempre vuelve. Pueden haber saltos temporales de más de 10 años entre película y película a lo largo de su filmografía y, sin embargo, sus historias nunca dejan de colocarse entre las favoritas de la crítica.
Algo así es lo que le ha ocurrido con ‘El poder del perro’, la cinta de Netflix (disponible en Orange TV) en la que la directora y guionista ha reinventado el género western. Lo ha hecho con la particular visión femenina que caracteriza a sus historias, con el anhelo de otro tiempo pasado y una tensión entre personajes donde siempre se masca la tragedia.
Esto es lo que lleva a Jane Campion a salir airosa de Cannes y Venecia cada vez que estrena una nueva película. Pero, también, a triunfar en los Globos de Oro y los Óscar, como ha ocurrido este año con su última producción. Dos galardones que han convertido a Campion en la mejor directora (sí, con ‘a’) de 2022.
Aplaudida desde su debut
Pocos cineastas pueden presumir de haber ganado una Palma de Oro en Cannes con su primer trabajo. Es lo que vivió Jane Campion en 1982 con su cortometraje ‘Peel’, toda una carta de presentación con la que la directora dio a conocer su particular forma de contar y de reflexionar sobre las relaciones familiares.
El primero de sus relatos, sobre un padre y un hijo, que nada tiene que ver con la infancia de Campion en Nueva Zelanda. Hija de una madre que provenía de una familia acomodada y de un padre con un linaje obrero, Jane empieza desde temprana edad a relacionarse con el mundo del teatro (al igual que sus dos hermanos).
Sin embargo, no se decanta por el cine hasta que se muda a Australia para estudiar pintura. Al parecer, empezó a hacer sus primeros cortometrajes casi como un experimento, en vista de las limitaciones narrativas que tenían otras disciplinas artísticas. Fue entonces cuando decidió inscribirse en la escuela de cine, donde desarrolló diferentes trabajos. Entre ellos se encontraba ‘Peel’, pero también otros como ‘A Girl’s Own Story’ o ‘Passionless Moments’, con los que también obtuvo bastante reconocimiento internacional.
Una filmografía que se concibe a cámara lenta
El pasado mes de enero, la cineasta pasó a ser el foco de todas las críticas cuando, en medio de su discurso, le dijo a Venus y Serena Williams que ellas no habían tenido que jugar frente a los hombres, como ella. Polémicas aparte, con solo un breve repaso a la filmografía de Jane Campions, se puede percibir que en casi 40 años dedicados al séptimo arte apenas ha dirigido un total de ocho largometrajes y una serie de televisión.
Son, aproximadamente, las mismas cifras en las que se mueve una de sus colegas de profesión, Kathryn Bigelow, también conocida por tener largos intervalos de tiempo entre proyecto y proyecto. En cualquier caso, sea cual sea la razón que haya detrás de estos parones, es muy inusual que directoras tan aplaudidas hayan tenido tan pocas películas en cartelera.
En el caso de la carrera de Jane Campion, no obstante, este ritmo se ha convertido casi en un sello personal. El suyo es un tipo de cine que se cuece a fuego lento, pero que también se disfruta despacio. Es lo que ha dado lugar a algunas de sus joyas cinematográficas más conocidas, como estas cinco películas imprescindibles:
‘Sweetie’
Se trata del primer largometraje de la carrera de Jane Campion, en el que interactúan diferentes personajes femeninos de personalidad extrema. Se ambienta en Australia y tiene un aire bastante ‘indie’, lo que en su momento llamó bastante la atención de los críticos. Su trasfondo esconde un relato sobre las relaciones humanas y familiares que, puede parecer algo abstracto, pero que hizo que la directora ganara el premio Independent Spirit Award en 1991 por la Mejor Película Extranjera.
‘Un ángel en mi mesa’
La segunda película de la directora no es especialmente recordada, pero en su momento se hizo con un total de cinco galardones en el Festival de Venecia. Se trata de una adaptación de la autobiografía de la escritora Janet Frame, que ya desde pequeña se sentía diferente a las personas que la rodeaban. Una historia muy conmovedora, que lleva intrínseco el estilo melancólico que ha hecho famosa a Jane Campion.
‘El piano’
La cinta más conocida de la directora, con la que ganó la Palma de Oro en Cannes y el Óscar al Mejor Guion Original. También, una pequeña Anna Paquin se hizo con el galardón de Hollywood como Mejor Actriz de Reparto -y eso que estaba acompañada por otros genios de la actuación como Sam Neill y Holly Hunter-. Cuenta la historia de Ada, una mujer escocesa que se traslada a Nueva Zelanda con su hija (y su piano) para vivir con su nuevo marido. La protagonista no habla desde hace años, por lo que suele expresar sus sentimientos a través de la música. Por un revés del destino, termina dando clases de piano a un vecino, con el que comenzará una relación a escondidas que le acarreará fatídicas consecuencias.
‘Bright Star’
También ambientada en un escenario de época, esta película presenta una historia sobre el primer amor. En este caso, entre un joven poeta inglés y su vecina. Aunque en un principio no hay aparente interés entre ellos, pronto surge el romance (a pesar de que sus allegados no lo aprueban). La película se encuentra en el catálogo de Amazon Prime Video, también disponible bajo suscripción en Orange TV.
‘El poder del perro’
Un western muy inusual, protagonizado por Benedict Cumberbatch, Kirsten Dunst, Jesse Plemons y Kodi Smit-McPhee. Disponible en el catálogo de Netflix, la cinta se centra en el propietario de un rancho que le hace la vida imposible a la nueva esposa de su hermano y al hijo de esta. También merece la pena ver, en la misma plataforma, el documental ‘Detrás de las cámaras con Jane Campion’, que explica todo el proceso creativo que hay tras el rodaje de la película. Sin duda, toda una excusa para empezar a revisitar la filmografía de Jane Campion y celebrar -aún más- su talento para el cine.
Imágenes | Netflix