El oscarizado director Ang Lee vuelve a revolucionar el cine digital con ‘Géminis’, protagonizada por Will Smith.
Esta coproducción estadounidense y china llegará a las salas españolas el próximo 11 de octubre y promete toda una experiencia inmersiva gracias a la tecnología usada durante el rodaje.
Ang Lee, director de películas como ‘La vida de Pi’, ‘Brokeback Mountain’, ‘Sentido y Sensibilidad’, ‘Tigre y Dragón’ y ‘Hulk’ pretende con esta nueva, fantástica y futurista cinta ‘humanizar’ el cine digital. Su objetivo es que el cine creado (o recreado) a partir de tecnologías digitales sea más real y envolvente para el espectador. Más creíble. Y, para ello, no ha reparado en gastos y ha experimentado con los límites de estas innovaciones en el cine que le han permitido dirigir a Will Smith por partida doble.
¿De qué va ‘Géminis’?
Henry Brogan, interpretado por Will Smith, ha dedicado su vida a trabajar para las cloacas del gobierno norteamericano como sicario. Hasta que decide cambiar de aires y de profesión. Como es lógico, el estado no va a arriesgarse a que Brogan pueda contar lo que sabe, por lo que se ve envuelto en una agobiante persecución por parte de un agente entrenado, precisamente, para poder acabar con él.
Pero Henry era el mejor en lo suyo. No había un sanguinario más eficaz y preciso que él. Excepto él mismo. Henry se verá en la paradoja de tener que enfrentarse a una versión más joven de sí mismo, clonada a partir de él. O intentar salvarle de una vida como la que él ha tenido.
‘Geminis’ es, fundamentalmente, una película de acción, aunque toda esta exploración de la psique y del alma humana se desarrolle en paralelo, lo que da profundidad a la historia. Es uno de esos hits concebidos para disfrutar en una sala de cine (impensable e incluso irreproducible en una televisión convencional) y de esa sensación de increíble realismo que aporta el formato.
El doble papel de Will Smith
Will Smith se prodiga por partida doble en este film. Por un lado, aporta su veteranía y su experiencia a Henry, un personaje con el que comparte edad, 50 años. Por otro, dota de emociones —de vida, en definitiva— a Junior, su versión de 23 años creada digitalmente a partir de una referencia real: el mismo actor a esa edad. Es tan original y extraño como ver a Will Smith enfrentándose a sí mismo en la época en la que rodaba ‘El Príncipe de Bel-Air’.
Como hiciera Andy Serkis por Gollum, es el mismo Will Smith el responsable de cada expresión, de cada movimiento de Junior. Y es gracias a la tecnología de captura de movimientos.
Su experiencia y la edad, afirma el propio actor, le dan la perspectiva necesaria para poder entender al personaje de Junior y captar su energía y sus motivaciones. Algo que no podría haber hecho si tuviera 23 años y tuviera que interpretar a alguien de 50. Will Smith ha madurado en todos los sentidos.
Para el actor (y eventual conferenciante), rodar ‘Géminis’ ha supuesto todo un reto actoral. Uno más en su escalada desde la comedia al cine fantástico, pasando por el drama. Ya le hemos visto convertir un personaje de cuento en un ser de carne y hueso, gracias a su maravillosamente histriónica interpretación del genio de ‘Aladdin’, y transformarse en el mítico boxeador ‘Ali’. Pero también nos ha emocionado con historias lacrimógenas, como ‘En busca de la felicidad’.
Es tan original y extraño como ver a Will Smith enfrentándose a sí mismo en la época en la que rodaba ‘El Príncipe de Bel-Air’
Una vez más, Smith cambia totalmente de registro para ofrecer una actuación doblemente compleja: meterse en el alma de dos personajes idénticos pero diferentes. Un pasito más en esa carrera a ser considerado uno de esos actores que ya se va mereciendo un Óscar.
El despliegue tecnológico de Ang Lee
Antes de rodar ‘Géminis’, Ang Lee ya había jugado con las posibilidades del HFR (High Frame Resolution Playback) y la tecnología de grabación y visionado a 120 fps (frames por segundo) en 2016 con ‘Billy Lynn: Honor y sentimiento’, aunque el Blu- Ray de la peli solo soportó finalmente los 60 fps.
Para que te hagas una idea, la tasa habitual del cine son 24 frames o imágenes por segundo. Las cifras que maneja Ang Lee son más propias de los videojuegos. Al multiplicarse de esa forma las imágenes, la sensación de realidad aumenta, llega y se capta mucha más información visual. La tecnología de rodaje 3D y la resolución en 4K aportan un nivel de nitidez impresionante. ¿El resultado? Más que una película, toda una experiencia hiperrealista para los sentidos.
Ya se habla entre los expertos de esta tecnología como el cine digital del futuro. Para Ang Lee, este parece ser solo el principio de una larga evolución del formato. Aunque el futuro, para él, ya empezó hace años. En esta nueva película no ha hecho sino aplicar parte de lo aprendido en su experiencia con ‘La vida de Pi’ (también rodada en 3D y por la que ganó el Óscar a Mejor Director), pero aprovechando las últimas innovaciones que han ido surgiendo desde entonces.
Una vez más, Ang Lee vuelve a ser pionero en el cine digital. Para él también es un paso más allá en una carrera que se caracteriza, ante todo, por rendir culto a la imagen.
Además , por se cliente Orange te invitamos al preestreno de esta divertida película el 11 de octubre en los siguientes cines:
MADRID: MK2 PALACIO DE HIELO
SEVILLA: ARCOS MULTICINE
BARCELONA: DIAGONAL
BILBAO: ZUBIARTE
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Suerte!!
