Ternura, crudeza y humor: ‘El Agente Topo’ es una de las películas que aspiran a conseguir un Oscar en 2021 como Mejor Película Documental. También fue nominada a los Goya 2021 como Mejor Película de Habla Hispana. Tras el éxito que obtuvieron sus anteriores apuestas documentales, la cineasta Maite Alberdi promete volver a brillar con esta oda a la ancianidad que cuenta con la participación de Orange.
Un retrato de la tercera edad en primera persona
El detective Rómulo recibe un encargo de una clienta preocupada por el trato que pueda estar recibiendo su madre en la residencia de mayores donde se encuentra. Para conocer de primera mano cómo es el día a día allí dentro, Rómulo contrata a Sergio, que hará las veces de topo infiltrándose en el hogar de la tercera edad como un residente más. Pero Sergio no es exactamente un espía profesional: tiene 83 años, ha perdido a su esposa, necesita distraerse y no se maneja del todo bien con la tecnología. No obstante, resulta ser el espía perfecto: cada día que pasa junto a los residentes, se va mimetizando y viviendo como uno más.
Gracias a este peculiar topo, tanto Rómulo como los espectadores podemos conocer de primera mano cómo viven los ancianos esa etapa de su vida a través de emotivas anécdotas, pero también el papel de sus cuidadores y sus familias. La lágrima y la carcajada están aseguradas a partes iguales.
Agente secreto a los 80 años
Nuestro detective aficionado es Sergio Chamy, un comerciante jubilado de 83 años. Dedicó buena parte de su vida al comercio, hasta que su negocio cayó en bancarrota. Su última etapa laboral la pasó en una viña. Acostumbrado a trabajar toda su vida, no asumió dejar de hacerlo en su jubilación: más que un empleo, necesitaba estar ocupado. Por eso no dudó en presentarse al casting que le convirtió en el protagonista de ‘El Agente Topo’. Rómulo, el detective profesional, buscaba un hombre de más de 80 años que se valiera por sí mismo, tuviera disponibilidad y cierto manejo de la tecnología.
Maite Alberdi: sensibilidad sin complejos
No es la primera vez que Maite Alberdi brilla como directora. Su primer largometraje como directora y guionista, ‘El salvavidas’ (2011), compitió en la categoría de mejor película en el Festival Internacional de Cine de Edimburgo. Consiguió sus primeros premios gracias a ‘La once’ (2014), un documental donde cinco mujeres de avanzada edad que se conocieron en el colegio charlan sobre el paso del tiempo, la amistad y la situación de Chile. Este título ya fue nominado al Goya en la categoría de mejor película iberoamericana.
Su otra obra clave hasta la fecha es el documental ‘Los niños’ (2017), en el que explora los sueños de un grupo de amigos con síndrome de Down que lleva 40 años asistiendo al mismo colegio.
A caballo entre el documental y el cine noir
Con ‘El Agente Topo’, Alberdi recupera la ancianidad, un tema universal capaz de llegar a distintos públicos y territorios. En esta ocasión lo aborda desde un género híbrido donde se mezcla el documental y la ficción. Aunque no hay ningún actor y todo lo que sucede es real, la directora recurre a ciertas licencias estilísticas para montar la historia y retratar a los personajes.
En 2020 se hizo con el premio a la mejor película europea en el Festival de San Sebastián, que otorga el público; fue seleccionada para la sección oficial de documentales internacionales del Festival de Sundance y también ha sido nominada a mejor película latinoamericana en los Premios Foqué. Pero aún tiene un camino de éxitos por delante: es candidata al Óscar como Mejor Documental.
