Cómo sobrevivir a un mundo de spoilers

El siglo XXI está lleno de dramas audiovisuales. No sólo porque haya que esperar tiempos insospechados hasta que sale la nueva temporada de esa serie que tanto te gusta, sino porque un elemento de terminología anglosajona está protagonizando nuestros días para llenarlos de incertidumbre y pánico social. Sí, hablamos de los ‘spoilers’.

¿Qué hemos hecho para merecernos esto?, te preguntarás. No hay forma de escapar de ellos. Son como una plaga que puede aparecer en cualquier momento y en las condiciones más insospechadas. Puedes acabar con ellos de un plumazo siguiendo al día todas las series que te gustan, el problema es que las obligaciones diarias no siempre permiten ver los capítulos al momento de su estreno. Es ahí donde aparecen los spoilers, esos terribles entes.

Sí, tú también has tenido esa sensación. Ese deseo instantáneo de cometer ilegalidades contra esa persona que pregona hasta el más minúsculo detalle de la escena que marca el giro definitivo en el argumento. Vamos, la muerte de un personaje que evidentemente no esperabas, por ejemplo. Al revelarte este suceso te ha destrozado la emoción de conocerlo por ti mismo. Porque sí, no nos gusta que nos lo cuenten. Como buenos seriéfilos, queremos tener la primicia de verlo con nuestros propios ojos y no tener que ir así por la vida.

El problema es que, por muchas veces que insistas en desconectar las redes sociales, poner tu móvil en modo avión y llevar siempre tapones en el metro ante posibles conversaciones peligrosas, al final siempre hay algo que incita a tu oído a escuchar y confirmar la catástrofe. Aunque la parte más racional del cerebro busque aislarse en sus pensamientos, ese nombre, esa palabra, esa conjunción, es capaz de hacerte asociar todo el contenido de la trama. Y entonces, de nuevo, se produce esta reacción.

Te la han vuelto a liar. Está claro. Pero no puedes hacer nada. Luchar contra los spoilers en un momento como éste supondría aislarse de la civilización y marcharte a un campo sin conexión a internet. Realidad bastante imposible, por otro lado, ya que también te perjudicaría a la hora de poder seguir disfrutando con tus series favoritas.

En ese punto, sólo queda resignarse y aceptar que únicamente los valientes salen a la calle por la mañana después de un capítulo de estreno. Por eso, si ves a alguien paseando con gorra, cascos, tapones y temor en sus ojos el día después de un gran capítulo de alguna de las series de moda, no te asustes. También está luchando por terminar su jornada y llegar a casa en la ignorancia más absoluta. Porque no, no se puede luchar contra los spoilers. Ellos tienen el dominio y a nosotros sólo nos queda –por desgracia– la resignación.

Afortunadamente, no todo está perdido, ya que en Orange TV puedes seguir tus series favoritas e intentar evitar, en la medida de lo posible, esa terrible palabra: ¡spoiler!